Recluidos en un sótano, un grupo de vencidos de la guerra civil contempla la vida a través de un simbólico tragaluz. Jugando con el tiempo, Buero Vallejo consigue una dimensión de «sobrecogimiento histórico» que obliga al espectador a entrar en acción y afrontar los problemas de su entorno.
Publicado en 1967, El tragaluz ahora se eleva a la categoría de clásico contemporáneo.